Rosti de arroz con setas y gambas

El Rosti es un plato original y muy popular en la cocina suiza. Aunque en sus comienzos formaba  parte del desayuno de los agricultores del cantón suizo,  hoy en día se sirve como acompañamiento de platos de carne, pescado o algunas verduras.

De todas formas nosotros vamos a preparar una variante del original ya que en lugar de la patata vamos a utilizar el arroz como ingrediente principal y lo vamos a acompañar con un variado de setas y unas gambas. Esperamos que os guste.

Ingredientes:

1 cebolla

120 gr de arroz

20 ml de vino blanco

250 ml de caldo de verdura o pollo

100 gr queso manchego curado

1 cucharada de curry

2 yemas

Sal y pimienta

80 gr de setas variadas

1 chorrito de coñac

1 ajo

2 gambas
Perejil

Elaboración:

Pochamos la mitad de la cebolla y añadimos el arroz. Damos unas vueltas durante un par de minutos y echamos la cucharadita de curry. Removemos y regamos con el vino blanco. Dejamos cocinar hasta que se evapore el alcochol.

A continuación añadimos el caldo caliente y cocemos nuestro arroz. Luego retiramos del fuego y le agregamos el queso manchego previamente rallado y las dos yemas de huevo.

Removemos muy bien hasta que los ingredientes se mezclen. Pasamos el arroz a los aros metálicos o moldes que hayamos elegido para la presentación. Los llevamos a la nevera y dejamos que se enfríen.

Otra opción es poner el arroz en una fuente de vidrio o similar forrada con papel film y con una altura aproximada de 1 ó 1,5 cm. Luego cortaremos a la medida que deseemos para presentar nuestro rosti.

Mientras, vamos a preparar las setas. Para ello sofreímos el ajo y la otra media cebolla bien picada en una sartén y cuando esté tierna le añadimos las setas variadas. Las cocinamos bien unos minutos y le añadimos el chorrito de coñac. Dejamos que evapore el alcohol. Retiramos del fuego y reservamos.

Pelamos las gambas. Las abrimos un poco por la mitad y retiramos los intestinos. Después las pasamos por una sartén o bien las gratinamos un par de minutos.

Ahora retiramos el arroz de la nevera, lo sacamos del molde y lo pasamos por la sartén con un poco de aceite o mantequilla hasta que nos queden bien dorado por ambas partes. Conseguiremos así un toque crujiente en el exterior.

Encima pondremos unas cucharadas de las setas que teníamos reservadas y por último colocamos unas gambas encima. Decoramos con aceite de perejil.