Hoy elaboraremos una receta bien sencilla, y sana.
Utilizaremos algunos ingredientes que le darán un
toque asiático.
Ingredientes (para 4 personas):
320 gr. de
garbanzos cocidos
1 manojo de
espinacas frescas
1 cebolla
1 cucharada de
curry amarillo
1 cucharadita de
curry rojo picante
1 ramita de
citronela
1 bote de leche
de coco
Sal
Pimienta
Aceite de oliva
virgen extra
Elaboración:
Limpiamos y
cortamos la cebolla a trocitos pequeños. Echamos un chorro abundante de aceite
de oliva en una sartén y pochamos a fuego lento hasta que esté transparente.
Añadimos la pasta de curry amarillo y rojo.
Removemos bien unos minutos hasta que se deshagan bien.
Añadimos los
garbanzos hervidos que habremos escurrido bien.
Limpiamos bien
las espinacas para quitar los restos de tierra que puedan tener y cortamos
dejando solo la hoja.
Las hervimos durante aproximadamente 15 minutos.
Las escurrimos
bien, y las añadimos en la sartén donde teníamos los garbanzos.
Mezclamos bien
todos los ingredientes y salpimentamos.
Agregamos la
leche de coco y la ramita de citronela que habremos cortado en una par de
trozos.
(para aquellos
que no la conozcáis, se trata de un
tallo de una planta aromática con un intenso sabor cítrico. Podéis comprarla en
cualquier tienda de alimentación asiática. Se usa mucho en la cocina Thai).
Rectificamos de sal.
Mezclamos bien y
cocinamos unos 15 minutos hasta que la salsa se haya reducido.
Para el emplatado,
podemos servirlos en unos cuencos de barro.
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